Este espacio cooperativo es parte de la identidad de la casa y nació con ella: Miguel amaba la música, tocaba en una banda de Punk con la que ensayaba en su casa, y fue luego de supuestas denuncias por ruidos molesto cuando comenzó la persecución y al asedio policial que terminó en su secuestro. Cuando la Asociación abrió la Casa de Cultura y Oficios, espontáneamente nos vinculamos con el Proyecto Adolescentes Bajo Flores, quienes hicieron la primera instalación de la sala de ensayo. Pasaron los años y vinieron nuevos docentes y músicos que fueron haciendo su aporte, hasta que en 2012 pudimos hacer la instalación final con materiales aislantes y acústicos, todos los componentes electrónicos para el sonido y la compra de los instrumentos necesarios para que, además de una sala de ensayo completa, fuera también un estudio grabación de audio y sonido y que pueda funcionar como radio y televisión.
El músico León Gieco, Padrino de nuestra institución hizo una visita en el año 2014 en la que fue reporteado por extudiantes del taller de Periodismo y cantó junto a alumnxs del taller de Ensamble Musical.
La sala funciona como espacio de formación musical para niñxs y jóvenes pero además es un espacio accesible para quienes no pueden pagar el costo de la hora de alquiler de una sala de ensayo y/o grabación. La sala es administrada por jóvenes en formación de sonido y música, y personas que están en situación de calle -coordinadas por profesorxs y activistas- y son ellxs quienes reciben lo que se paga a través de bono contribución.
A finales de 2018 hubo un robo en la casa y fueron saqueados los equipos: perdimos consolas y controladores, un mixer, algunos micrófonos y cámaras. Eso no impidió que siguiéramos trabajando y poco a poco vamos reponiéndolos
La sala abre sus puertas para alquiler de lunes a viernes de 12 a 23.