Justicia por Marcelo Montenegro: Ante Casación, la madre pidió que se revoque la absolución a los policías asesinos y se los condene por homicidio

Rosa Montenegro, mamá de Marcelo Montenegro, pidió a los jueces de la Sala 2 de la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional que revoquen la sentencia que en 2018 dejó libres a los policías que mataron a su hijo. Acompañada por Rosa Bru, junto al abogado Nicolás Rechanik, del equipo legal que la representó por la Asociación Civil Miguel Bru (AMB), la madre pidió que se haga justicia y sean condenados los policías de la Comisaría 48 que el 12 de julio de 2012 asesinaron a su hijo a balazos en Ciudad Oculta.


Durante la audiencia virtual, los jueces Horacio Días, Claudio Marín y Eugenio Sarrabayrouse ampliaron los detalles del recurso presentado por lxs abogadxs de Rosa Montenegro contra la sentencia dictada por lxs jueces del Tribunal Oral Nro. 30 Guillermo Friele, Marcela Rodríguez y Luis Rizzi, que en 2018 absolvieron a los efectivos Emmanuel Alejandro Díaz, Diego Marcelo Calderón y Mario Nicolás Medina.


Aquel fallo fue apelado de inmediato por lxs abogadxs Federico Paruolo, Nahuel Berguier y Gabriela Carpineti -del equipo legal que representó por la AMB a la familia Montenegro durante el juicio-, que solicitaron su revocación y pidieron que se condenara a los policías Díaz y Calderón por el delito de homicidio agravado por haber sido cometido por miembros de las fuerzas policiales en abuso de sus funciones.


Ante Casación, el letrado por parte de la AMB Nicolás Rechanik argumentó que durante el juicio, tanto para la querella como para la fiscalía, quedó probado que los policías atacaron a balazos a los jóvenes -Marcelo murió por un disparo mortal- y que encubrieron el hecho y les plantaron un arma.


Desde la Casa de Cultura y Oficios Miguel Bru – sede de la AMB en CABA dónde se conectó a la audiencia virtual-, Rosa Montenegro contó que luego del crimen fue hostigada por la policía y dio detalles de cómo intentaron encubrir la causa desde el principio, que incluso tuvo que ir a reconocer el cuerpo de su hijo en dos oportunidades, y del temor de lxs testigxs del crimen. “Hace 10 años que sostengo que a mi hijo lo mataron. No tenía armas, ni se tiroteó con nadie. Voy a confiar en la justicia, espero que los jueces de Casación hagan justicia por mi hijo”, afirmó tras la audiencia.


Rosa Bru, presidenta de la AMB, dijo: “Esperemos que los jueces de Casación nos den la respuesta que buscamos hace 10 años. Seguimos pidiendo perpetua porque en el juicio se probó como asesinaron a Marcelo y luego intentaron encubrir el crimen. Como ya lo dijimos desde la Asociación, este es un caso de gatillo fácil donde se intentó tapar la verdad con una causa armada por el encubrimiento policial desde el primer momento. La sentencia absolutoria del Tribunal en 2018 fue vergonzosa, demuestra que para ellxs la vida de un pibe no vale nada”.


El crimen


El 12 de julio de 2012 a las cuatro de la mañana Marcelo Montenegro y Nahuel Maturano iban por el barrio “Villa 15” en un Renault Twingo que tenía un pedido de captura de la justicia bonaerense. El auto fue visto por tres policías que comenzaron una persecución por la calle Lisandro de la Torre en dirección a la Avenida Piedrabuena, pasando por Zuviría. Los policías Díaz y Calderón efectuaron al menos 5 disparos contra el vehículo con la clara intención de matar a los jóvenes. El Renault Twingo chocó contra un paredón. Marcelo Montenegro murió media hora más tarde.


Entre las objeciones a la sentencia, Rechanik también destacó que tanto para la querella como para la fiscalía no hubo agresión por parte de Montenegro y Maturano, y que no existió una justificación para que la policía les disparara. También remarcó que en el juicio se probó que ninguno de los dos jóvenes había portado el arma que fue secuestrada en el lugar, que no fue disparada y que no funcionaba ya que su cañón estaba obturado. Tampoco se encontraron rastros de pólvora en las manos de los jóvenes. “Todo esto indica que el arma fue plantada por la misma policía”, aseguró el letrado. Destacó también que en la sentencia se desestimó el testimonio de Maturano, quien afirmó que no iban armados.


Además aclaró que durante el juicio se analizaron las grabaciones y transcripciones de las modulaciones radiales que mostraron que los policías recién se refirieron a un supuesto enfrentamiento luego de perseguir a los tiros el auto donde iban los jóvenes, del choque, y de comprobar que el joven había muerto. La defensa había planteado que esa madrugada se pudieron haber “pisado” las comunicaciones durante las modulaciones. Sin embargo, las pruebas indicaron que es imposible que los equipos de modulación puedan haber fallado y que los policías intentaron encubrir el crimen instalando la idea de un enfrentamiento luego de haber disparado contra Marcelo Montenegro.


El juicio


En la primera etapa de la investigación la abogada de la AMB fue Belén Beyrne. Seis años de lucha de la familia y la AMB hicieron posible que se avanzara con la investigación, que los policías no fueran sobreseídos a partir de las apelaciones presentadas y la causa no fuera cerrada
El juicio comenzó el 28 de marzo de 2018. La Fiscalía contó con la colaboración de la Procuraduría de Violencia Institucional. El fallo absolutorio de la sentencia dictada por el Tribunal Oral Número 30 fue unánime.


Lxs abogadxs que representaron a la familia habían solicitado prisión perpetua para los tres imputados por “homicidio agravado en cumplimiento de sus funciones”. Pidieron la misma pena para Medina, el chofer del patrullero, por considerarlo “partícipe necesario” del crimen. La titular de la Fiscalía 26, Graciela Gils Carbó, pidió perpetua para Díaz y Calderón y la absolución para Medina, y la defensa de los policías solicitó que los tres fueran absueltos.